En los últimos años, el sector de los gimnasios en España ha experimentado una transformación significativa, con la irrupción de las cadenas de gimnasios low cost, que han cambiado radicalmente el panorama para los establecimientos más pequeños y tradicionales. Estos gigantes del fitness, gracias a su capacidad para ofrecer tarifas reducidas y servicios estandarizados a gran escala, han capturado una porción considerable del mercado, poniendo en jaque la viabilidad de los gimnasios pequeños y familiares.